Ya hace un año desde que se publicó la última encuesta “Hacia una Oficina Verde: la situación ambiental de las oficinas en España“, realizada en colaboración por las empresas Aguirre Newman, G-Advisory y Aire Limpio.
Hablan de “oficina verde” porque se trata de un cuestionario dirigido a más de 100 empresas de gran tamaño con presencia importante en el mercado español, sobre cuestiones relativas a la sostenibilidad, la eficiencia energética y en definitiva, a la política ambiental.
Hoy os exponemos las conclusiones de dicha encuesta con el fin de verlas con un año de perspectiva y a la espera de la próxima encuesta sobre oficina verde.
Como podréis ver las actuaciones de las empresas se centran actualmente en la eficiencia energética, y poco a poco incorporan la preocupación por la calidad medioambiental interior de los edificios (en concreto, por la calidad del aire).
Esta preocupación debe seguir desarrollándose más allá de la calidad del aire, para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, y al fin y al cabo, su productividad. Conseguir una verdadera Oficina Verde, es un objetivo no tan difícil de alcanzar con el asesoramiento y gestión correctos. Además es necesario extender las medidas a empresas de menor tamaño para que la oficina verde sea una realidad en la mayoría de los casos.
Conclusiones sobre oficina verde:
1. La eficiencia de la climatización y la iluminación son ámbitos muy tenidos en cuenta en la gestión de los edificios.
- El ahorro energético reduce el impacto ambiental y supone ahorro económico, por lo que es un aspecto por el que las empresas se preocupan habitualmente.
2. Aumenta el número de empresas que certificadas (o en proceso) con a algún estándar de edificación sostenible que las acredite como “oficinas verdes”
- El auge público de dichas certificaciones es evidente y se asocia a la intención de mostrar a la sociedad los esfuerzos de la empresa en lo relativo a política ambiental.
3. Más de la mitad de las empresas cuentan con un responsable de gestión energética de sus edificios
- En realidad se trata de una consecuencia de la primera conclusión. La oficina verde es más sencilla con un responsable de gestión energética.
4. El Cálculo de la Huella de Carbono se consolida como metodología de cálculo de los impactos de edificaciones, productos y servicios.
- Dicho cálculo es un proceso complejo pero es el más riguroso en sus conclusiones, de ahí su uso habitual.
5. Cada vez es más común la implantación de un plan de gestión eficiente del agua.
- El consumo de agua en las oficinas no suele ser excesivo por lo que su gestión no ha preocupado excesivamente hasta hace poco. Pero la creciente preocupación por la eficiencia en general ha añadido su gestión a la lista de prioridades en una oficina verde.
6. Las medidas de ahorro energético en la edificación son práctica habitual y más de la mitad de las empresas recogen dichas medidas en un plan de eficiencia energética
- La rehabilitación energética de los edificios que contienen las oficinas es una medida fundamental para el ahorro a medio plazo, por lo que suele incluirse dentro de las prioridades de la empresa.
7. Los sistemas de gestión energética certificados (UNE-EN-ISO 50.000) siguen siendo una opción minoritaria
- Son una herramienta que permite el control sobre el consumo energético de forma objetiva y clara, pero las empresas muestran más interés por certificaciones sostenibles más conocidas por la sociedad (LEED, BREEAM…)
8. La planificación de las compras responsables y la evaluación ambiental de los proveedores es una realidad para la mitad de las empresas
- Muchas empresas muestran interés y preocupación por la política ambiental de las empresas proveedoras y las empresas fabricantes de productos, sobre todo en la compra de aparatos eléctricos eficientes, papel y productos químicos. Un aspecto importante en una ofician verde.
9. Cada vez más empresas están concienciadas con la importancia de la Calidad de Aire Interior
- Muchas de ellas realizan estudios y auditorías sobre la calidad del aire interior, pero se obvian otros aspectos como la contaminación electromagnética o la presencia de luz natural.
10. Todavía hay muchas empresas que desconocen tanto la Calidad de Aire Exterior, como el nivel de filtración necesario.
- La calidad del aire interior depende directamente del aire exterior y de su filtración correcta antes de introducirlo en el edificio, y curiosamente se trata de un área aún por descubrir en la mayoría de las empresas.
Así pues, es evidente que las empresas con un considerable tamaño están adaptando sus instalaciones y organizaciones en busca de una política ambiental que les lleve al ahorro energético y a una oficina verde. Ahora el reto está en la implantación de dichas medidas en la pequeña y mediana empresa, un proceso algo más complicado por la menor disponibilidad de medios para conseguir dicho objetivo.
Será la sociedad la que con el tiempo demande más y más oficinas verdes donde la política ambiental repercuta claramente en la calidad de vida de todos los implicados.